Augusto Perez 

Caballeriza, 1973, carboncillo sobre papel, mm 350×500

Nacido en 1929 en Mesina. De niño se trasladó a Nápoles donde estudió Arquitectura, pero a partir de los años '50 su pasión por la escultura tomó el control. Después de una primera experiencia trabajando junto a Guttuso en Terracina en una corriente neorrealista, se dedicó a una escultura con fuertes acentos plásticos. Su escultura tiende hacia un valor simbólico, sus temas favoritos son la sombra, las metamorfosis, la imagen duplicada en el espejo. 

Principalmente escultor, el dibujo en colección aparece como el proyecto para una escultura, como lo demuestra el podio sobre el que descansa el caballo. En diciembre de 2000, aproximadamente un mes antes de su fallecimiento, se realizó una importante retrospectiva en el Castel dell'Ovo en Nápoles.