La villa dei Sette Bassi es una de las villas más grandes y magníficas de la campiña romana, sólo superada por la Villa dei Quintili por extensión. La gran zona arqueológica se encuentra a la derecha de via Tuscolana, cerca de la intersección con via delle Capannelle. Sus imponentes estructuras también son visibles desde la carretera y se puede acceder a ellas ingresando a la larga avenida arbolada que llega al corazón de la zona arqueológica. Los imponentes restos han recibido la atención de los estudiosos desde el siglo XVIII. La consistencia de las ruinas era tal que se consideraba una ciudad por derecho propio, de ahí el epíteto de 'Roma Antigua'. Los estudios realizados por el arqueólogo inglés Thomas Ashby y por el arquitecto Nicolae Lupu contribuyeron a la construcción de la maqueta de la Villa que ahora se exhibe en el Museo de la civilización romana en EUR. El complejo es propiedad del Parque Arqueológico Appia Antica, que recientemente llevó a cabo una serie de intervenciones conservadoras y volvió segura la zona.