Después de la instalación creada para los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín 2006, Tony Cragg regresa a Italia para crear una exposición en la Reggia di Venaria presentando una selección de diez esculturas creadas entre 1997 y 2021. Las esculturas de Cragg, uno de los artistas contemporáneos ingleses más exitosos en el mundo, se enmarcan en el itinerario de exposiciones permanentes de la Reggia, comenzando por la Corte de Honor, continuando en el Parco Alto dei Giardini, para llegar a la sala interna al final de la Scuderie Juvarriane.

Obras de gran formato, modeladas con diversos materiales, del bronce a la madera, de la fibra de vidrio al acero, todas caracterizadas por las típicas líneas onduladas y sinuosas, que parecen modeladas en un gigantesco torno de alfarero.

El trabajo de Tony Cragg analiza las múltiples relaciones existentes entre los seres humanos y el medio ambiente. Utilizando una amplia selección de materiales y técnicas escultóricas, el artista tematiza la compleja conexión entre la figura, el objeto y el paisaje, que para Cragg incluye tanto sistemas geológicos y microbiológicos como contextos urbanos e industriales.