La exposición es el acto de devolver al público un proyecto más amplio, que prevé residencias en Roma para fotógrafos de renombre internacional y que la administración Capitolina lleva tiempo persiguiendo con el compromiso de valorizar la fotografía y dotar a la ciudad de una Roma de un patrimonio de imágenes capaces de restituir su identidad a través de diferentes perspectivas.

Para esta edición, Francesco Zizola invitó a Roma a cuatro autores conocidos en el mundo de la producción artística y fotográfica internacional -Olivia Arthur, Antonio Biasiucci, Max Pinckers, Alfred Seiland- que se midieron en condiciones completamente excepcionales, las creadas por la pandemia de Covid -19. . Trabajando durante el encierro durante 2020, e inmediatamente después, enfrentaron una realidad sin precedentes desarrollando pensamientos e investigaciones que tienen en el centro los temas del tiempo y el espacio, los cuerpos y las relaciones, el espacio urbano y interior. Los mismos temas que caracterizan los debates más avanzados sobre las imágenes y sus modos de funcionamiento.

Los trabajos presentados renuevan el lenguaje fotográfico y al mismo tiempo preparan una clara crítica del mismo.

A través de una variedad de enfoques visuales y conceptuales, estas nuevas producciones ofrecen una mirada multifacética y profunda a las muchas almas de la ciudad y representan un legado nuevo e importante para la colección del Archivo Fotográfico del Museo de Roma.