Esta exposición personal de la fotógrafa y artista Lara Zibret en Manifiesto Blanco - comisariada por Massimiliano Bisazza - tiene como enfoque central la presencia-ausencia del ser humano dentro de espacios arquitectónicos y no lugares, donde todo es posible pero donde sobre todo hay belleza, narrada a través de historias y relatos urbanos a menudo contradictorios entre sí, pero siempre verdaderos e introspectivos. La fotografía digital es hija de ese daguerrotipo del que todo se desprende, y habla de ciudades en Italia, Nueva York o Japón, donde el hombre está casi completamente ausente, ya que su "falta", dentro de las obras de Zibret, es la verdadera investigación antropológica que la fotógrafa quiere llevar a cabo.

Una serie de instantáneas en blanco y negro donde reina un orden preciso, que otorga simetría a todo el escenario fotográfico de manera totalmente espontánea y personal. El objetivo de Lara, particularmente sensible a los temas arquitectónicos, sabe captar y transmitir referencias que van desde el minimalismo hasta el brutalismo: estilos y temas elegidos con gran cuidado para llamar la atención incluso del más experto en fotografía.

Las obras expuestas resumen de manera tautológica la esencia del artista, capturada en momentos efímeros y fugaces; en esos momentos precisos en los que el tiempo se detiene, quedando suspendido en instantes de atemporalidad, donde todo está inmóvil de manera perfectamente perpendicular.

Lara Zibret, nacida en el '83, obtuvo la Maestría en Fotografía en la Academia de Bellas Artes de Bolonia. Fotógrafa por pasión y profesión, reflexiona con sensibilidad sobre las potencialidades de la imagen, sobre su presencia dentro del entorno urbano en el que vive y trabaja, y del que está rodeada, inspirándose en él, investigándolo y capturando esa belleza que a menudo está oculta a un ojo desprevenido.

Actualmente trabaja para la revista de arquitectura Fashink y anteriormente con RedBull "Wooden Energy station".

Desde 2004 expone regularmente en Italia y en el extranjero.