La Academia Nacional de San Lucas presenta la exposición Daniele Puppi. Eh, lampu! a cargo de Marco Tirelli, ex presidente de la Academia.

Desde sus inicios, Daniele Puppi (Pordenone, 1970) ha cuestionado la idea de espacio euclidiano, concibiendo su trabajo como un verdadero work in regress. De hecho, las obras nacen después de un período de gestación transcurrido dentro de los espacios expositivos, durante el cual el artista experimenta el ambiente y establece con él una relación casi carnal, explorando sus límites y potencialidades.

Prefiriendo la video-instalación, Puppi ha desarrollado un enfoque radicalmente nuevo del medio, subvirtiendo su uso convencional y poniendo en primer plano el sonido y la reconfiguración visual-arquitectónica, convirtiéndolos en elementos de continua metamorfosis. Las tecnologías utilizadas — proyectores de video, pantallas LED, sincronizadores, amplificadores, subwoofers, altavoces, micrófonos — son herramientas funcionales para activar las facultades perceptivas del espectador, involucrándolo como parte integral de la obra. El espectador/visitante está así llamado a entrar en una nueva y extraña dimensión espacio-sensorial.

También en esta exposición individual en la Academia Nacional de San Lucas, Puppi nos catapulta in medias res: con un sobresalto, un destello, un deslumbramiento. El título de la exposición, Eh, lampu!, de hecho hace referencia a una típica expresión del sardo logudorés que expresa asombro o sorpresa ante un fulgor repentino e inesperado — el destello. Su aparición, rápida y vívida, desconcierta al observador: lo desorienta, lo reorienta, lo proyecta en otra realidad perceptiva.

Un agregado de energía — un rayo, precisamente — surge de los cuatro trabajos expuestos, que, como una descarga eléctrica, atraviesan y transforman los ambientes arquitectónicos de Palazzo Carpegna, alterando radicalmente la percepción.