El Museo de Ciencias Arqueológicas y Arte de Padua se encuentra en los sugerentes espacios del último piso del Palacio Liviano creados especialmente por Gio Ponti en la década de 1930, bajo el rectorado de Carlo Anti. La reciente restauración arquitectónica y la nueva exposición de las colecciones han devuelto la funcionalidad original a los espacios de uno de los mejores ejemplos de museografía italiana de la década de 1930, así como uno de los raros museos universitarios creados en ese período. Hoy el Museo alberga tres secciones principales en sus 14 salas: el coleccionismo (sala Mantova Benavides), las colecciones arqueológicas (en las 12 salas centrales) y la galería de yesos en la sala del mismo nombre. Desde 2008, también se exhibe en esta misma sala la nueva sección litológica "Lazzarini", junto a la cual en los últimos años se ha agregado una sección educativa (maquetas y muestras). Como en una máquina del tiempo ideal, las colecciones del museo cuentan personajes y acontecimientos que forman parte de la larga historia de los estudios antiguos y reflejan los cambios, culturales y metódicos, que caracterizaron el nacimiento y la estructuración de la disciplina arqueológica en Padua. lo que pasó en el resto de Europa. Al mismo tiempo, la extrema heterogeneidad de las colecciones, resultado en su mayor parte de donaciones, compras y algunos depósitos raros, posibilita muchos otros itinerarios para visitar el museo en cuanto a las clases de materiales conservados y la cronología relativa. Cada núcleo tiene, de hecho, características y composiciones diferentes que reflejan gustos, épocas y también oportunidades de adquisición extremadamente diversas, que se remontan posteriormente al uso didáctico y de investigación.