El Museo de los Tejidos Mediterráneos explora, investiga y exhibe, a través de las formas y decoraciones de la cerámica, la joyería, los tejidos y el vestuario, los vínculos existentes entre las culturas de los pueblos del Mediterráneo en la producción artística.

El Museo alberga también una de las colecciones de arte contemporáneo más importantes de Italia, testimonio de la contribución que artistas de todo el mundo han dado a la reconstrucción de la ciudad de Gibellina tras el terremoto que la destruyó en el 68.

El Baglio Di Stefano, sede del Museo, en el antiguo Granaio expone las obras del grupo Forma 1 con obras de Carla Accardi, Dorazio, Sanfilippo, Turcato y Consagra; del grupo Piazza del Popolo, con Schifano, Angeli, Tano Festa y Mambor; de los artistas de las últimas décadas Boetti, Scialoja, Germanà, Nunzio, Genovese, Matta, Emilio Isgrò y Luca Patella con algunas presencias carismáticas como la de Beuys.

También se exponen obras de artistas del área mediterránea, entre ellos Hakim Abbaci, Nja Mahdaoui, Moussa Traore y el Tappeto Volante, una instalación del Stalker Group. En los espacios exteriores se encuentran La montaña de sal de Mimmo Paladino, Circle of Life de Richard Long e instalaciones de Alfredo Romano, Peter Briggs, Francesco Arecco, Michele Cossyro, Ben Jakober, Salvatore Cuschera.