La danza de los sables (Bal do Saber) es otro de los cinco lienzos encargados a Giulio Boetto para el museo en construcción (1936). La escena representada está inspirada en la danza armada que se realizaba en Castelletto Stura, Bagnasco y Fenestrelle en la provincia de Cuneo. El origen medieval de este tipo de representaciones está atestiguado por numerosas fuentes históricas y la presencia, en un rincón del lienzo, del detalle del jugador moro, remite a la época de la invasión sarracena. Las características estilísticas de Boetto se encuentran una vez más en las combinaciones de colores vivos y en los detalles del paisaje.