Es la primera pintura de caballete documentada del pintor, una obra maestra de la pintura florentina del siglo XVII. La protagonista es Semiramide a quien el escudero Artace advierte del incendio de Babilonia y la consiguiente caída de la ciudad. El lienzo hace referencia a Bilivert y al difunto Rosselli, mostrando también influencias de los grabadores de Lorena Callot y Bellange. Ambientada teatralmente en pisos sucesivos, la escena se centra en la conversación entre las dos figuras principales, Semíramis, imponente y luminosa con suaves ropajes, y el caballero, que le trae la noticia del incendio de Babilonia.