El pangolín gigante llamado Ikaga es el animal sagrado por excelencia para la Lega. Sus pelos compactos se agrupan en escamas córneas, que cubriéndose entre sí protegen todo el cuerpo. Esta particularidad lo convierte en el símbolo de la unión entre la Lega, ya que cada miembro del pueblo cumple un rol muy específico que garantiza la protección de todo el clan. El pangolín, debido a lo sagrado de su propia naturaleza, no puede ser cazado. Nuestro artefacto representa un animal arqueado de cuatro patas, cuyo cuerpo se estrecha hacia la cola para terminar puntiagudo, enriquecido por incisiones ortogonales que forman placas en relieve.