El PAV Parco Arte Vivente presenta Sobre cobre, cera, hierro, glicina y hielo. Elena Mazzi: 10 años de paisajes olfativos, laboratorios y conversaciones , exposición personal de la artista Elena Mazzi comisariada por Marco Scotini . La relación entre los territorios en riesgo y las comunidades que los habitan desencadena las prácticas de Elena Mazzi (1984), que deconstruyen y cuestionan las dicotomías epistémicas de la modernidad, instándonos a pensar en una nueva relación ecológica entre naturaleza, cultura y mundo; Mazzi recoge casos de estudio en campo, lugares de trabajo, laboratorios portátiles, implementa diferentes conjuntos de procedimientos, intercambios interdisciplinarios, vocabularios indígenas y especializados, para superar los límites de las áreas en las que se produce y se produce el conocimiento. Siguiendo el contraste entre “ciencia estatal” y “ciencia nómada” (Deleuze y Guattari), podríamos vincular la investigación de Elena Mazzi a este último modelo teórico.

Mazzi se introduce en los campos artístico, antropológico y científico con un enfoque “menor”, con un enfoque rizomático en el que las circunstancias, de vez en cuando, sacan a relucir las herramientas, los vínculos disciplinares y los posibles interlocutores. El objetivo es encontrar una respuesta no convencional a las urgencias ecológicas, al extractivismo neoliberal, al colapso de la biodiversidad, buscando nuevos imaginarios de interconexión, intersección y dependencia mutua, más allá del monopolio cognitivo del conocimiento occidental. El horizonte estratégico de su trabajo, en cuanto a contenidos y metodologías, es sensibilizar a las subjetividades involucradas sobre la importancia de la dimensión ecosistémica y de las “entidades circulantes” (Bruno Latour) que pueblan la sociedad.

El título de la exposición indica precisamente este proceso aditivo de múltiples laboratorios a partir de materias primas. Al combinar las artes visuales con soluciones y tácticas de disciplinas como la geografía, las ciencias sociales y la antropología, en la obra de Elena Mazzi, la práctica artística se convierte en acción dentro de las comunidades.