El nuevo proyecto expositivo Hanauri. Japón de los vendedores de flores, que se desarrolla dentro del programa de reorganización de la galería japonesa de las colecciones permanentes, está dedicado a la práctica de la artista Linda Fregni Nagler, presente en el MAO el pasado noviembre con la performance Cosas que la muerte no puede destruir.  

La exposición, visitable hasta el 4 de mayo, explora su meticuloso enfoque de selección y recopilación, reelaboración y reactivación de fotografías japonesas de la escuela de Yokohama (Yokohama Shashin). Las fotografías originales, recopiladas a lo largo de veinte años por la artista y presentadas por primera vez en el MAO, se acompañan de las obras de Linda Fregni Nagler, quien ha vuelto a fotografiar las albúminas originales, imprimiéndolas en cuarto oscuro y coloreándolas a mano con una técnica similar a la de la época (1860-1910). Esta intervención otorga nuevos significados a las imágenes, ilustrándonos la historia de una forma precisa de mirar el exotismo y la alteridad. 

El tema investigado en el MAO es el de los vendedores de flores (hanauri), una categoría muy apreciada de vendedores ambulantes (bōtefuri) en el Japón de los períodos Edo y Meiji.