“El deseo es crear un espacio abierto en diálogo con la plaza, cuyo punto de apoyo serán dos esculturas luminosas unidas por una pista de baile que invitará a la participación colectiva para activar el espacio con el uso del cuerpo, siguiendo los pasos de baile sugeridos”.

La primera instalación reproducirá la estructura de un coro, inspirada en la escenografía barroca efímera, mientras que la segunda, más esbelta verticalmente, se ubicará sobre una plataforma que actuará como centro de encuentro e intercambio, acercando al público a la obra. Este último será una explosión de luz y palabra, con señales luminosas en forma de conos que transmitirán mensajes de emancipación y empoderamiento del individuo en un contexto creativo colectivo. Ambas instalaciones involucrarán activamente a la comunidad en cada etapa del proceso creativo, no solo en el resultado final. Deseamos unir diferentes energías creativas a través de una implicación en múltiples niveles: las frases presentes en los carteles en forma de árbol serán seleccionadas junto con asociaciones y escuelas, valorizando las expresiones de la tradición local; los pasos a incluir en la alfombra de baile se elegirán de forma colaborativa con la población; finalmente, la participación en el espectáculo de inauguración dará vida a un verdadero evento público en el espacio urbano.