Suppergiù 60 sillas en 60 años no es solo una exposición: es el testimonio de la pasión declarada de Vico Magistretti por la silla.
Él mismo lo admite en una entrevista de 2003: "Tengo una pasión un poco vergonzosa por las sillas. Creo que es porque es lo más difícil, no perdona nada. Es difícil estar contento con una silla".

Es una obsesión conocida y cultivada: ya en 1980, a partir de una idea de su amigo Enrico Baleri, Vico organiza su propia "exposición personal" en el Studio Marconi de Milán, Veinte años, veinte sillas. El título es simple, efectivo, y también funciona en Londres al año siguiente, cuando con un pequeño retoque se convierte en Twenty-one years, twenty-one chairs para el Designers' Saturday.

Y hoy la Fundación estudio museo Vico Magistretti relanza con Suppergiù 60 sillas en 60 años. La exposición también nace de aquí, pero nace, sobre todo y como siempre, del archivo del Studio Magistretti. Luca Poncellini, el curador de la exposición, prácticamente se ha trasladado allí: ha leído y releído cartas, actas de acuerdos, faxes, notas de prensa; ha estudiado carpetas de patentes y fotos de prototipos y modelos; ha examinado dibujos y descifrado apuntes. Y gracias a este trabajo minucioso y profundo, las líneas de diseño de Vico - el diseño conceptual, la reinvención de la tradición, el toque autobiográfico - se han convertido en el relato de toda una carrera a través de una única tipología: la silla.

La exposición se desarrolla en dos recorridos: una línea de tiempo con dibujos originales y reproducciones fotográficas de las más de sesenta sillas - sesenta y seis para ser precisos, demasiadas para el pequeño estudio museo... - diseñadas por Magistretti en sus sesenta años de carrera. Y luego una docena, suppergiù, de sillas para usar y probar, y otros tantos cuadernos llenos de historias de cada silla: intuiciones, colaboraciones, correcciones, replanteamientos, desafíos productivos e incluso algunos problemas legales.