Paisaje. Studio es una de las pocas pinturas desenterradas hasta la fecha ciertamente atribuible al período de colaboración entre Rubaldo Merello y Alberto Grubicy, circunstancia que prueba la etiqueta de la galería Grubicy, claramente identificable al reverso, que certifica su participación en el Salon des peintres divisionnistes italiens del 1907, donde Merello está representado por seis obras. El cuadro es un atisbo de exuberante matorral mediterráneo que se asoma al azul, que se destaca en la maraña de las ramas de los pinos marítimos. El lienzo iluminado por destellos de amarillos y naranjas, fogosos de rojos y morados construidos con rayas azules que rebotan por todas partes, jugado con las notas de verde escondidas en la densa vegetación, escenifica el espectáculo de la naturaleza en un día claro y cálido. Modula un material precioso que se convierte en luz y color a través de una desbordante variedad de signos, una construcción sin aridez técnica, esclavizando al contrario el divisionismo al temperamento instintivo innato del artista. Datable a 1907, en la fase de plena y voluntaria marginación, Paisaje. El estudio revela, en la reelaboración de la técnica, ahora muy personal, una madurez estilística que lo libera definitivamente de los modelos de referencia iniciales.