El objeto de la imagen es un juego de escritura del siglo XIX. Se pueden reconocer el tintero, para sostener la pluma, los cilindros que albergaban la tinta y el recipiente para el polvo absorbente. Las plumas de ganso representaron la herramienta de escritura por excelencia en la Edad Media. Estaban hechos del plumaje de pájaros como gansos y cisnes. Antes de ser utilizados tenían que ser trabajados. El proceso consistió en la limpieza de las barbas, un primer corte oblicuo con una posterior temperatura (mediante inmersión en arena caliente) de la pluma para desengrasarla y hacerla más resistente. Luego se terminó la pluma para definir una abertura de al menos 2 cm, una especie de cámara interna. Finalmente, se recortaba el pico para hacer la punta acorde al tipo de escritura. Había también otras herramientas de escritura además de la pluma, como la mina de plata o la aguja de plomo, esta última utilizada para el dibujo inicial sobre el pergamino.